No soy una entrada

Entrada número 0: Sobre la autorreferencialidad, en algunas múltiples formas.

La referencia a uno mismo emerge de la exposición al entorno, de la entrada de información que estimula el sistema nervioso y que es transformada, codificada e interpretada por nuestro cerebro. A su vez, está modulada por nuestros aprendizajes e historias vitales, los cuales otorgan determinadas valencias y significados a las asociaciones generadas en ese recurrente flujo torrencial que es la vida.

Denominamos redes al conjunto de vías transitadas con mayor frecuencia, las cuales se han abierto paso sucesivamente con el paso del tiempo. Redes con sus nodos o núcleos, con sus posibles «vecinos» y a su vez con todo un clúster o cúmulo de memorias y significados.

Si bien no estoy empleando un lenguaje especialmente técnico o científico, ni mucho menos preciso, me gustan el tipo de analogías que recorren el propio sentido, la intuición, de cómo funciona «por dentro» nuestra mente. Especialmente cuando se parecen o asemejan a otras cosas más conocidas, palpables o visuales cuando menos. Porque ciertamente un computador o una galaxia tienen su complejidad y son inabarcables sensorialmente, pero son en cierto modo algo más próximas al entendimiento que nuestro propio cerebro y la conciencia humana, que parecen ser la frontera del conocimiento junto con las grandes preguntas o misterios universales.

Sin más divagación, que no dilación, vuelvo al riel.

Estaba planteando la referencia a uno mismo como lugar común al que acudir cuando exploramos la psicología, los procesos naturales, los mecanismos subyacentes a lo aparente. Pero es que este asunto, como ya han establecido otros (grandes mentes), está presente a lo largo y ancho de la realidad que percibimos, y de la que aun desconocemos lo suficiente como para permitirnos explorar. No es casual que continuamente volvamos a ello como refugio de la certeza del desconocimiento, o como consecuencia de viajes hipotéticos por callejones mentales. Bucles, recursividad, fractales, retroalimentación, contradicciones…

Podríamos agrupar estos conceptos en dos grandes ejes: “Fenómenos Recurrentes” y “Fenómenos Lógicos”, con la autorreferencia como nexo transversal. Un posible esquema (a modo de mapa mental) podría lucir así.
  • Bucle: (Del francés «boucle», con raíz en el latín tardío «buccula», que evoca un “rizo” o “anillo”)
    Un giro que se cierra sobre sí mismo y hoy describe una secuencia que se repite hasta cierto punto o condición.
  • Recursividad: (Del latín «recursus», “volver atrás”) Versión más profunda del bucle. Un proceso que se realimenta de su propia definición, llamándose a sí mismo para resolverse.
  • Fractal: (Del latín «fractus», “roto”)
    Una estructura auto-semejante que reproduce su forma a diferentes escalas, generando patrones infinitos.
  • Retroalimentación: (Del latín «retro», “hacia atrás”, y “alimentación”)
    Un ciclo en el que la salida retorna como entrada, reforzando o modulando el proceso de forma continua.

  • Autorreferencia: (Del griego «auto», “uno mismo”, y del latín «referre», “relacionar”)
    Cuando algo remite a su propia existencia, describiéndose o definiéndose a sí mismo en su discurso.

  • Contradicción: (Del latín «contradictio», “hablar en contra”)
    La oposición simultánea de dos afirmaciones que no pueden ser verdaderas al mismo tiempo dentro de un mismo marco lógico.
  • Paradoja: (Del griego «pará», “más allá”, y «dóxa», “opinión”)
    Una contradicción aparente que desafía la lógica convencional y expande los límites de lo que creemos posible.

A partir de las leyes fundamentales del materialismo dialéctico*, se establece una noción de realidad que se encuentra intrínsecamente ligada a la transformación fruto de tensiones inherentes al mero hecho de existir en un ambiente interconectado. Esta idea encierra una intuición que podemos percibir al examinar el mundo y también a uno mismo. Ahí reside la «magia», lo inefable, del mismo modo que desentrañar leyes fundamentales de la naturaleza, existe un misterio en la autoconciencia, en el meta-pensamiento sobre esta misma realidad en que estamos insertos.

Es un hecho que, cuanto más saciamos el hambre intelectual que despierta la mera idea de sentirse consciente, más conscientes de la futilidad de abarcar tal inmensidad. Medirla, delimitarla, categorizarla… son intentos vanos, pero estimulantes, que curiosamente no ceden ante la evidencia: estamos sumidos en «algo» que nos supera en cantidad y en cualidad, o mejor dicho, nos extralimita el espacio y el tiempo (mencionaría dimensiones enrolladas a lo Kaluza-Klein pero hace años que no leo sobre cuerdas; sirva el fractal como «lugar» extra que se escapa a la comprensión más sensible), el constante devenir entre lo objetivo o subjetivo, que aspiramos a equilibrar y aproximar como si de esa manera una vida más justa o armónica fuese concebible.

Pues bien, quería combinar la escritura libre, el deshacerme de ideas superficiales y palabros varios; y así ha sido, pero sirva como piedra angular sobre la que seguir construyendo, en una iteración que apenas recuerda el eco de la original, pero como siempre divagando y recomponiendo la voz.

Porque todo esto va sobre un viaje de re-descubrimiento, de encuentro con uno mismo y de querer ser.

Las viejas paradojas, el oxímoron con matices, el absurdo cotidiano, corriente y moliente, nos recuerda que siempre hay por explorar, explicar y contextualizar; pero también nos reducen al pequeño y humilde lugar del que sabemos estamos enraizados profundamente como seres humanos que somos. La pequeña mota de polvo suspendida, a la vez que contenemos multitudes y conectamos con lo imposible.

* El cambio dialéctico; La acción recíproca, o lucha de contrarios; La contradicción: la negación de la negación; La transformación de la cantidad en cualidad o progreso por saltos

En próximas entradas… :

Quiero expandir los diferentes elementos que me atraen y que configuran el juego de la contradicción; no solo desde el puro ejercicio intra-mental sino desde la ontología y la acción material. Esta entrada era recreativa/experimental.

Me gustaría recuperar a Hofstadter pero admito que es una lectura muy lejana y querría hacerme con el libro físico, además del más reciente sobre analogías. Luego tengo por ahí el tema de la simetría, pero mas de lo mismo; primero me empaparé de ello, después divagaré.

Tengo unas cuantas charlas en vídeo que quiero compartir pero aun no sé si haré un apartado de «contenido de interés» para ir enlazando blogs y material que me flipa.

Más sobre psicología, sociedad y un marco o modelo teórico desde el que analizar.

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Reafference and the origin of the self in early nervous system evolution | Philosophical Transactions of the Royal Society B: Biological Sciences – via https://x.com/BioTay/status/1890824329169912265

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